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  1. 1. Aspectos temáticos

    • ·         Los asuntos se componen de amores imposibles, pasiones ilícitas, rebeldías políticas, venganzas, desafíos, el mundo de ultratumba, suicidios, situaciones patéticas hasta el límite. Todo ello está marcado por un destino trágico, por la fuerza del sino.
    • ·         Los personajes son típicamente románticos: seres misteriosos, tipos marginales (rebeldes, conspiradores…etc.), héroes generosos y amorales.
    • ·         Se alternan espacios realistas con otros fantasmales y misteriosos aunque son estos dos últimos los preferidos: castillos, tormentas, cementerios, escenas nocturnas, paisajes inhóspitos…etc.
    • ·         Tanto en los temas como en los personajes y ambientes se observa una preferencia por lo histórico (vuelta a la tradición nacional) o por lo legendario y novelesco.
    • ·         En cuanto a la intención, ya no se tratará de aleccionar; el único propósito del dramaturgo será conmover profundamente al espectador.

    2. Aspectos formales

    • ·         Ante todo, se rompe la regla de las tres unidades: el argumento puede presentar acciones diversas que se entrecruzan (la acción no transcurre en un día; se buscan que los tiempos sean muy distantes entre el primer y el último acto); la escena cambia con frecuencia de lugar.
    • ·         La división de actos no responde a un criterio uniforme: hay dramas en tres actos (como Don Álvaro), pero también de tres actos hasta de siete (Don Juan Tenorio).
    • ·         Se borra la separación entre la tragedia y la comedida. Hablamos de drama, en el que, si bien domina lo trágico, se da cabida a los elementos cómicos.
    • ·         El lenguaje se caracteriza por la grandilocuencia y el retoricismo (poco natural). Por otra parte, junto al tono más elevado y retórico, encontraremos el estilo bajo o llano (lenguaje coloquial, vulgar)
    • ·         La prosa y el verso pueden mezclarse en una misma obra. En cuanto a la versificación, ésta se caracteriza por la polimetría (libertad de versificación).
    • ·         Los recursos escenográficos adquieren gran importancia en esta época. Se procura que el decorado contribuya a crear la atmósfera adecuada (misterio, tenebrosidad…) Hay contrastes luminosos y sonoros que permiten impactar al espectador y que salga del espectáculo no sólo entretenido, sino conmocionado.

    3. Tipos de dramas:

    ·         Drama histórico

    Los dramaturgos enmarcan sus obras en tiempos pretéritos, surgiendo así el drama histórico, cuyos argumentos eran un pretexto para sacar a escena temas políticos de entonces y animando a la lucha contra la tiranía y el mal gobierno (véase la conspiración de Venecia).

    ·         Drama Nacionalista

    Este reproducía la historia sin caer en tentaciones manipuladoras de la realidad. Esta tendencia fue seguida por Zorrilla, donde un mismo personaje es presentado como crueles y déspotas o como justos y benevolentes. Estos personajes son de las clases altas (reyes, señores….). Abunda lo inesperado y misterioso. Escasea la burguesía que solamente aparece como relleno.


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